El yacimiento arqueológico altomedieval de Fuenteávila data de los siglos IX al XII. Configuran su necrópolis al menos 15 sepulcros, excavados en los lanchares graníticos, que se distribuyen por 7 conjuntos de enterramiento muy próximos entre sí. Este tipo de yacimiento es frecuente en las zonas serranas de la provincia de Ávila, correspondiéndose con áreas sepulcrales cristinas que pertenecían a pequeñas comunidades de aldea, dispersas por las sierras, cuya base económica fue la ganadería, y que se mantuvieron al margen de los focos de influencia, por lo que conservan numerosos arcaísmos.
