ERMITA DE LA MERCED:
La ermita de Nuestra Señora de la Merced se sitúa en el paraje denominado “Las Erillas” próxima al Camino Viejo de Burgohondo. Posiblemente fue construida en el siglo XVII, si bien no aparece citada hasta 1751 en el Catastro del Marques de la Ensenada como ermita de Nuestra Señora de las Mercedes.
Está edificada en mampostería reforzando sus vanos y aristas con sillares de granito. Embutidas en los muros de la ermita aparecen dos bases de cruces. En el libro de fábrica de la parroquia, se cita que en 1786 se visitan los libros de rentas y limosnas de Nuestra Señora de la Mercedes y Nuestra Señora de la Concepción, por lo que ya tenían culto ambas imágenes.
En el siglo XIX la ermita estaba rodeada por un muro de mampostería careada, colocando los mampuestos, labrados por una sola cara, formando el paramento y rellenando los huecos con ripio. La cimentación de este muro apareció en las obras realizadas para el enlosado del entorno y acceso al templo.
La imagen original de Nuestra Señora de las Mercedes fue destruida durante la Guerra Civil en 1936. Esta imagen llevaba entre las manos unas cadenas de preso, recordando la labor de la Orden de la Merced en la liberación de los cautivos cristianos en las tierras del norte de África.
El profesor Cándido Ajo en su obra “Historia de Ávila y su Tierra, de sus hombres y sus instituciones, por toda su geografía provincial y diocesana” en su recorrido por los archivos parroquiales dice que, a principios del siglo XX, se celebraba en Navaluenga, misa y procesión con motivo de la festividad de Nuestra Señora de la Merced, el 24 de septiembre.
ERMITA Y LA PROCESIÓN DE LOS ROMANCES DE LOPE DE VEGA.
Desde su interior las mujeres entonan “La Despedida” durante la Procesión de los Romances el Jueves Santo, procesión declarada Fiesta de Interés Turístico Regional por la Junta de Castilla y León en el año 2009.
La procesión de los Romances tiene su origen en el siglo XVII, con motivo de la Contrarreforma. En la procesión del Jueves Santo dos cuadrillas de romanceros cantan un total de 14 romances escritos por Lope de Vega, dedicados a la pasión y muerte de Jesucristo.
En estos romances, tiene gran protagonismo el dolor de la Virgen, a la que acompañan los romanceros durante la procesión. Pero sin duda lo que la hace única es “el pique”, la rivalidad existente entre las cuadrillas de romanceros que intentan imponerse cantando lo más alto y rápido posible para provocar que la otra cuadrilla se equivoque al entonar las más de 300 estrofas que se recitan.
Para poder disfrutar de esta tradición se realizan tres paradas durante la procesión donde se entona un romance entero, parada la procesión, para facilitar que se pueda escuchar sin dificultad la singular melodía de los romances.
La primera de estas paradas tiene lugar frente a la ermita de la Merced, la segunda en la Plaza de España y la última frente a la iglesia parroquial, donde se desarrolla el denominado “Pique” para discernir que cuadrilla es la ganadora.
Tradicionalmente la cuadrilla perdedora invitaba a los vencedores a bollitos y limonada. En la actualidad el Ayuntamiento de Navaluenga y la Hermandad de los Romanceros realizan esta invitación, a todos los vecinos y visitantes, en la Plaza de España.